VIEJOS ROCKEROS

La verdad es que hay días que te levantas realmente mal de la cama y cuando digo mal me refiero a viejo.
Días en que te preguntas si esto es lo que sintieron los viejos rockeros cuando los nuevos niños les robaron sus guitarras.
Es ley de vida dejar paso a las nuevas generaciones pero a veces te jode hacerlo. Sientes que hay algo pendiente, que algo de esas millones de cosas que soñaste y que aún no se han echo realidad.
Piensas, sientes y ves que aun quedan cosas por aprender, como ese viejo rockero que aunque ceda el escenario a un nuevo grupo, su guitarra será siempre suya.
Sus canciones serás siempre suyas y como tal mucho después de que muera la gente las seguirá escuchando y disfrutando como si el tiempo se hubiese parado.
Esta es una de esas canciones, siempre que la oigo me gusta sonreír, es una tontería lo se, pero es algo innato y natural.
Porque esta es una de las pocas cosas que el espejo no me puede mostrar, es una de las pocas cosas que me hacen recordar, que a pesar de las canas aun puedes tener un corazón joven.
Esto se acerca mucho a la libertad.