SI AMANECE NOS QUEDAMOS

Hay noches que se tuercen y no te importa. Son esos días en los que ves que la noche va a dejar paso al día y sonríes con cara de niño travieso, de esos que juran no haber roto un plato y se han cargado toda la vajilla.
Son esos días donde descubres danzas y rituales como "La danza de Rocky victorioso" y te ríes hasta que las lágrimas se te escapan de los ojos.
Son días en que recuerdas que paso, que se rompió en tu vida para que se acabasen esos días, se que es una paradoja, pero sin embargo siento que me hacen falta mas esos días.
Son momentos de chistes malos, de estupideces y sonrisas cómplices que te recuerdan porque te gustaba tanto salir de noche.
Esos instantes son los que te hacen sentirte vivo, como si lo demás no importase y tan solo el segundo que se marcha es lo que importa.
Cambias de planes, te mueves y finalmente llegas a casa de día y descubres que lo haces cansado, realmente cansado pero con una sonrisa en la boca.
Sonrisa que refleja tus momentos de planificación del disfraz de los carnavales o ese viaje que tiene todas las papeletas para convertirse en el de tu vida.
Son de esos días que realmente crees que tienes a todos los que necesitan y por ello no te atreves a pedir nada mas, ni siquiera un poco, por miedo a que desaparezcan.