1/03/2011

2011 GOLPES

Así empezamos la mayoría el año, como si las campanadas de la puerta del sol se transportaran al interior de nuestras cabezas y replicaran una y otra vez hasta que el dolor se vuelve tan insoportable que dormir se convierte en una utopía.
Así empezamos, cansados antes de empezar y con tal resaca que algunos incluso empezamos con las promesas de nuevo año antes incluso de levantarnos, ya sabéis, ese famoso "No volveré a beber jamás".
Lo divertido es que las grandes historias nunca surgen en nochevieja, ni los flechazos, ni los momentos inolvidables, mas que nada porque nuestra memoria es tan precaria a la mañana siguiente que a duras penas logramos recordar lo que ha pasado.
Son días de empachos, de prisas y comer como si no solo se acabase el año...sino el mismo mundo y claro, cuando eso no sucede volvemos a la realidad y nos damos cuenta, que nada ha cambiado, que lo de año nuevo, vida nueva pues es una frase hecha, seguramente, por algún borracho a las doce y un minuto de un treinta y uno de diciembre de un año cualquiera.
Visto con frialdad, entramos en un año jodido, de esos de crisis, de apretarse el cinturón sin tener mas agujeros en las que meter la hebilla, de pelea con el corazón, de sueños que crean vacíos al cumplirse, de miedos a los cambios y no saber que nos depara el futuro, tan incierto que al mirarlo nos mareamos como si estuviésemos en una montaña rusa.
¿La solución?
Fácil y a la vez difícil.
Agarrarnos a nuestras guías, no prometer sino cumplir con lo prometido, no hace falta papeles ni pactos de sangre, ni chorradas por el estilo.
Mantenernos fieles a lo que somos, sin miedos, sin dudas o si nos surgen, solventarlas con mente fría y corazón caliente, lanzando órdagos cuando la vida nos envide.
Ver nuevos retos, seguir andando, sin miedo y con ganas de comernos todo, desde la modestia de saber que todo nos puede enseñar y que nos queda todo por aprender.
Vivir sin pisar, vivir no por el mero hecho de sobrevivir, aunque cueste, aunque a veces creamos que los sacrificios son demasiado altos, porque si es lo que hemos decidido, ese pago nunca será lo suficientemente, caro, ni duro, ni sacrificado.
En resumen, ser como somos y sobre todo evitando perder la sonrisa mas de 48 horas, que eso suele ayudar bastante.


1 Comentarios:

Unknown dijo...

Mikel tienes toda la razon del mundo!!!!!

Esperemos que este año sea mejor que el 2010, al menos para mi y que llegue lleno de alegrias!!

muxux


SOLAMENTE UNA PIEZA...