3/06/2010

SEGUIR NAVEGANDO

Hay un tiempo para todo, un lugar para cada recuerdo y un momento para cada sensación que cubren tu cuerpo como si de cicatrices se tratasen.
Son momentos malos, de esos donde la tormenta parece haberse olvidado de la calma, de esas que miras el mar y parece mas solitario, mas frío, mas oscuro.
Son momentos en los que tus huesos parecen quejarse, tu corazón reclamarte una huelga indefinida y tus arrugas demostrarte que tal vez tu también debes dejar ese mar para que otros piratas lo intenten conquistar.
Te intentas hacer a la idea, demostrarte que ya has navegado lo suficiente, lo necesario para poder escribir tu diario de abordo desde tierra firme.
Sin embargo tu siempre serás esa veleta fiel al viento.
Te miras el pecho y descubres que la rosa de los vientos sigue marcando el camino, un camino que siempre te lleva hacia el océano.
Es cierto que es un mar de dudas, de malos momentos, de errores y equivocaciones....y sin embargo es tu océano.
Tu libertad esta allí, tu riesgo a hundirte a cada instante, a naufragar a cada segundo pero aun así, sigues queriendo volver a ponerte tu parche en el ojo.
Quieres volver a ser ese pirata que navegó sin dejar prisioneros, sin tener que rendir cuentas al aire o sin tener que lamentar el exceso de Ron.
No sabes hacerlo de otra forma, no sabes ni quieres.
Eres un corsario que asalta las horas, los minutos y los segundos, un ladrón de sonrisas y asesino de lágrimas, es lo mejor que haces, es lo único con lo que te sientes vivo.
Por eso tendré que seguir buscando tesoros, por eso tendré que seguir asaltando sin descanso lo que mas odio.
La monotonía.



0 Comentarios:


SOLAMENTE UNA PIEZA...