Al fin la noche esperada pasó y la verdad si debemos atenernos a lo que dio de sí la noche en sí yo la daría un suficiente, raspado.....si no llega a ser por el concierto.
La verdad es que mucho antes del primer acorde, nosotros ya llevábamos una borratxera y media, así que tal vez lo que sentí se parecerá poco o nada a lo que en realidad sucedió.
Desde ese primer acorde el tiempo comenzó a desacelerar, en el segundo acorde lo hizo parar y el tercero lo transportó diez años en el pasado.
En el momento que Piperrak nos dio las buenas noches, todo volvió a ser lo que era, todo volvió al primer día que hace tantos años escuché "hoy he vuelto a soñar..."
Todo regresó, los empujones, las gente gritando enrrabietada, los botes, los antiguos himnos con los que crecí y en ese momento volvían a sonar como el primer día.
Cada canción despertaba en mí un antiguo recuerdo sepultado bajo buenos momentos mas cercanos, momentos en los que la edad, la inexperiencia y las ganas de comerte el mundo te hacían hacer cosas sin pensar.
Momentos en los que no usabas ni medio dedo de frente y la vida te pegaba oxtias día si y día también. Momentos de locura en los que tu único amor era la fiesta y las ganas de pasarlo bien con todos tus amigos.
Pero el tiempo tuvo que volver al presente y descubrir de forma cruel que tu cuerpo ya no asume tan bien el patxaran, que bajar por un tobogán es sinónimo de amago de ruptura de cabeza o que ya quedan muy pocos de los amigos de antes.
Pero ahora, después de haber vegetado durante todo el día de ayer, veo que están los que deben estar, tengo a alguien que vela para que no me abra la cabeza.
Así que la verdad no me puedo quejar, sino todo lo contrario.
Porque a pesar de lo bonito que pudo ser volver a esa época durante 2 horas, ahora soy mucho mas feliz que entonces.
Renaciendo
Hace 9 años
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