2/02/2013

PERDIDOS

Hemos terminado siendo exclavos de nuestros propios logros, una involución evolutiva hacia algo que hace tiempo que dejó de ser saludable.
Hemos perdido los valores que intentaron inculcarnos para sumergirnos en una carrera alocada hacia ninguna parte. Todos tenemos parte de culpa. Nosotros hemos decidido no hacer especial cada instante y sumergir nuestras miserias detrás de vasos repletos de olvido. Alcohol para escapar de una rutina que lejos de alejarla, la hemos abrazado con el mismo énfasis que un borracho sujeta un vaso repleto.
Nos hemos convertido en simples sombras.
Oscuras siluetas a las que nos asusta ser diferentes y alejarnos de los caminos marcados.
La televisión nos envenena con sus mundos perfectos pero somos nosotros los que portamos ese virus. Lo esparcimos como esporas con nuestro desprecio, con nuestra continua falta de respeto hacia el prójimo en el mejor de los casos y con la ignorancia ante el mal ajeno en el peor.
Mirar hacia otro lado es la fuerza con la que los demás mueven los hilos.
Por eso ahora todos nos echamos las manos a la cabeza ahora que descubrimos que los que gobiernan han estado robando durante años. Es ahora. No hace un año o dos, sino ahora que el mundo va de culo y sin frenos, cuando parece que descubrimos una verdad que lleva años siendo una realidad.
Me gustaría pensar que aprenderemos del error que cometimos al pensar que la honestidad es una virtud arraigada de todo aquel que hace promesas.
Lamentablemente seguiremos con nuestro futbol, nuestra tele y nuestras copas de fin de semana, mientras el mundo sigue pudriéndose poco a poco.

0 Comentarios:


SOLAMENTE UNA PIEZA...