7/21/2010

EVITANDO EL PROZAC

A veces las preguntas nacen con una respuesta atada a la interrogación, de tal manera como la necesidad de beber cuando se tiene sed.
Tal vez por eso me motiva escribir líneas sin sentido, párrafos donde intento purgar mis demonios, mis pequeñas sombras los días que no te apetece esbozar una sonrisa, tan falsa como pensar que nada malo existe fuera de nuestros mundos de fantasía.
Seguramente es mi forma de evitar la tristeza de la locura, esa que atenaza dentro del pecho y evita que respires, que sientas o que la derrota abrace cada uno de tus sueños.
Casi con certeza este sea mi pacto con el demonio, esos en los que te ayuda a evitar las pastillas y a la vez no volverte gris.
No voy a negar que sería mas fácil encender la televisión o sentarte en un diván para contar el fondo de armario que esconde tu mente.
Pero la caja tonta es una porquería y aquellos doctores del coco que no son familia, acaban siendo demasiado intimos como para que puedan pasarme consulta.
Es buscar la manera de purgar el veneno que nos agobia a diario y que se cura con preguntas de trivial o palabras desordenadas en un trocito personal que componen estas líneas y borrones.

1 Comentarios:

"Doctora del coco" dijo...

Es cierto, nunca podré pasarte consulta pero siempre podremos tomar café (o jugar al trivial, jeje) e intentar evitar tomar prozac, ¿trato?


SOLAMENTE UNA PIEZA...