Lo dejamos con el intento homicida por parte de Txino de volarnos a todos por los aires, tal vez hubiese sido lo mejor, así nos hubiesemos ahorrado el infierno que sufrimos horas después.
La verdad es que somos como niños y como tales, nos aburrimos enseguida de las cosas. Tras 20 minutos cacharreando con el Cheminova decidimos que debíamos practicar el deporte nacional, hacer alguna putadita.
Tras elegir blanco, cosa no muy dificil puesto que había mas de uno, decidimos jugar a los quimicos de otra manera. Mezclando medicamentos.
Así que ahi nos ves en la cocina con un montón de medicamentos, que el desalmado de mi compañero de habitación sacaba de su riñonera, como si de una chistera se tratase. Cada pastillita, roja, blanca o azul venía precedida de una explicación de sus efectos, como si de un anuncio de la tele se tratase. Que si esta es para la tos, que si la otra para los mocos o la de color rojo para la diarrea....nos daba igual, a base de golpes, mordicos o por empuje, las fuimos metiendo todas en un batido que algun incauto tomaría minutos después.
Pero nuestro gozo en un pozo, nos pasamos metiendo pastillitas y al final se corto el batido, hasta el punto que se convirtió en una especie de yogurt nauseabundo.
En aquel momento nos cabreamos por nuestra fallada gamberrada, pero ahora que lo pienso, sino se llega a cortar aquel veneno probablemente estaríamos imputados por asesinato, con alevosía y nocturnidad.
Bueno nocturnidad no porque eran ya las 8 de la mañana.
Viendo que ya no había nada que hacer y la novia de un servidor se estaba cagando en él (Briconsejo llamar a las 7 y media de la mañana a tu novia para darle los bu
enos días totalmente borracho NO es romantico) decidimos despertar al resto de la tropa, ver a nuestro amigo Bob esponja por la tele y salir preparados para recorrer los montes del durangesado.
Del resto mejor no hablar. Moribundos por el camino, un calor afixiante y a las cinco de la tarde todos a casa, decidiendo por mayoría que jamás iriamos para descansar un día antes al Ibilaldi...........O por lo menos hasta la próxima vez
La verdad es que somos como niños y como tales, nos aburrimos enseguida de las cosas. Tras 20 minutos cacharreando con el Cheminova decidimos que debíamos practicar el deporte nacional, hacer alguna putadita.
Tras elegir blanco, cosa no muy dificil puesto que había mas de uno, decidimos jugar a los quimicos de otra manera. Mezclando medicamentos.
Así que ahi nos ves en la cocina con un montón de medicamentos, que el desalmado de mi compañero de habitación sacaba de su riñonera, como si de una chistera se tratase. Cada pastillita, roja, blanca o azul venía precedida de una explicación de sus efectos, como si de un anuncio de la tele se tratase. Que si esta es para la tos, que si la otra para los mocos o la de color rojo para la diarrea....nos daba igual, a base de golpes, mordicos o por empuje, las fuimos metiendo todas en un batido que algun incauto tomaría minutos después.
Pero nuestro gozo en un pozo, nos pasamos metiendo pastillitas y al final se corto el batido, hasta el punto que se convirtió en una especie de yogurt nauseabundo.
En aquel momento nos cabreamos por nuestra fallada gamberrada, pero ahora que lo pienso, sino se llega a cortar aquel veneno probablemente estaríamos imputados por asesinato, con alevosía y nocturnidad.
Bueno nocturnidad no porque eran ya las 8 de la mañana.
Viendo que ya no había nada que hacer y la novia de un servidor se estaba cagando en él (Briconsejo llamar a las 7 y media de la mañana a tu novia para darle los bu
enos días totalmente borracho NO es romantico) decidimos despertar al resto de la tropa, ver a nuestro amigo Bob esponja por la tele y salir preparados para recorrer los montes del durangesado.Del resto mejor no hablar. Moribundos por el camino, un calor afixiante y a las cinco de la tarde todos a casa, decidiendo por mayoría que jamás iriamos para descansar un día antes al Ibilaldi...........O por lo menos hasta la próxima vez
1 Comentarios:
No estoy de acuerdo con el briconsejo. No veas lo romántico ke resulta ke te despierten con una melodía de fondo totalmente alkoholizada recitando: "... el símbolo de la muerteeeee... el símbolo de la muerteeeee"... jaja, vamos, ke por mi podéis repetirlo kuando kerais! es otra de esas cosas... ke no tiene precio. :)
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