4/13/2016

IDIOCRACIA





Este es el título de una película que viendo como están las cosas, en vez de una comedia se va a convertir en una profecía digna del mismísimo Nostradamus. La realidad es dura. El ser humano está extinto y el verdadero problema, es que nos hemos convertido en seres tan sumidos en la ignorancia que aún no nos hemos dado cuenta.
Es una realidad global, dibujada en la manera que se trata a personas, hombres, mujeres o niños. Los llamamos refugiados, una palabra genérica, fácil de moldear para no tener que pensar que detrás de cada una de esas miradas de miedo, hay una vida, familia o sueños truncados por la peor lacra del ser humano.
El dinero.
Papel mojado teñido en sangre, vergüenza o miseria, donde la dignidad humana siempre desaparece cuanto más se desea. Hemos sido testigos del último esperpento en forma de cuentas en paraísos fiscales, libres de pagar lo que deben y obligándote a ti cada mes de Mayo por caja. No vaya a ser que no quede dinero para obras sociales, pensiones o peor aún, que los comunistas acaben con este sistema perfecto del: “Tanto tienes tanto vales”
Sin embago la pregunta en:
¿Queremos seguir con esta forma de pensar?
No me refiero a la mentalidad global (me reitero en la idea que ya estamos extintos) sino a nivel local. Esa carencia de vergüenza de los ladrones, políticos sin ética y demás calaña mediática que se llenan la boca de exigencias y por las sombras son peor que los ladrones de Ali Baba. La sensación de total impunidad con la que aún siguen moviéndose, alérgicos a dimitir porque es sus varemos de personas honradas la palabra ética, esta violada, apaleada y malversada con tanta saña como los fondos públicos con los que se han llenado los bolsillos.
El pan de cada día y aquí no pasa nada, es la picaresca, esa seña identidad pareada con toros de huevos gigantes, de por cierto, otro de esos ilustres patriotas que tenían el dinero al otro lado del charco.
¿Pero porque no pasa nada?
La respuesta es fácil, han arrancado la creatividad, matando a los nuevos genios que a dura penas han salido los últimos años de unas aulas, cada vez mas alejadas de la palabra educación. Un plan maestro para crear borregos que crearán nuevos borregos hasta formar un gran rebaño que poder manejar sin problemas, idiotas dominando la basura, alejados de la élite y alimentados a bases de Realities de todo tipo. Enseñar que trabajar duro es una estupidez, es mejor enseñar las tetas en un plato de televisión o machacarte en un gimnasio para lucir un cuerpo diez. Mierda y mas mierda. Comida de mierda, televisión de mierda y sobre todo empozoñar la cultura, crear basura encuadernada, metérselo por los ojos a los borreguitos a cambio de unos euros. Hombres y mujeres de paja que adoptan los roles que sus amos les mandan, escritores, actores o cualquier otra cosa que quieran manchar y convertirlo en cuentas millonarias. La facilidad de la fama. Manteniendo lejos a la gente realmente innovadora, a esos científicos, escritores o cualquier otro valor humano, que es demasiado bueno para cuadrar en este juego de piezas de dominó.
Mientras una generación se vuelve a perder.
Esta droga no viene en aguja sino en forma de incultura, la ignorancia de la soberbia, donde todo adolescente sabe de memoria los nombres de millonarios que juegan con pelotitas pero ni siquiera saben quién fue Tejero o que fue eso de la dictadura de un tal Franco. La ignorancia es realmente peligrosa, la consecuencia que en contra de otros países, donde hasta un primer ministro se ha visto obligado a dimitir por la presión popular, aquí se resume en manifestaciones para salvar a un concursante del Gran Hermano o celebrar un título en el futbol.
Está claro que acabaremos llorando lo que ahora reímos, mientras tanto, sigamos disfrutando de este circo dantesco que nos está convirtiendo en la verdadera vergüenza de la humanidad.

0 Comentarios:


SOLAMENTE UNA PIEZA...