9/12/2013

TODO LO QUE SUBE...

Cuando la tregua supone el genocidio emocional te paras a preguntar que hiciste mal. Encontraras millones de razones innegociables sobre los errores donde debiste acertar pero fallaste. Destrozando el atrezzo de la obra de tu vida como si el elefante que tienes de corazón, se hubiera perdido en una cacharrería.
Ni siquiera tú te entiendes.
No llegas a comprender porque esos fantasmas siguen peleándose con las fantasías y no permites ceder un centímetro al verbo sentir. La coraza por bandera cubriendo los defectos que una simple canción puede quebrar como si se convirtiese en cristal, descubriendo tus pequeñas miserias, sintiendo que la vulnerabilidad de la que llevas tanto tiempo escapando se reproduce hasta convertirse en un gigante. Uno enorme, cuya mera sombra, puede espachurrarte contra el irregular suelo que pisas bajo tus pies.
A veces la ira no es suficiente.
Tampoco respirar hondo y cerrar los ojos con fuerza deseando que eso jamás existió.
Eso es inútil porque al final solo quedas tú y el disfraz de payaso de sonrisa postiza que decidiste portar para intentar fintar al doloroso rechazo. Manteniendo el aire entre cualquier otro cuerpo que se acerque lo suficiente como para comprobar que no hay nada de oro en lo que reluce.
Son días grises.
Jueves tan sangrantes como aquel Domingo en Irlanda.
Momentos que solo te queda escuchar esa canción y saborear esa sensación de desencanto como si fuera un don y no una maldición. Mentirte al hacerte creer que podrás crear algo de la miseria, traspapelando tu propia experiencia, a un personaje ficticio para toda la gente excepto para uno.
A sabiendas que eso no será un brote de imaginación sino el reflejo de un espejo distorsionado.



                                                                                                                                                                  

Leia Mais…

9/11/2013

MASTICANDO VINAGRE

No se lo que quiero, pero se lo que no quiero. 
Y no quiero molestar, ni que me toquen los güevos, 
ni quiero ir pa´tras, ni olvidar de donde vengo, 
ni ponerme enfermo cuando me mandan callar, 
no quiero avasallar pa tener lo que no tengo, 
ni guardar en un termo los adios pa la ensalá. 
No quiero desliar los libros que me meto, 
ni quedarme quieto,si me quieren liar. 

Así comienza una grandísima canción que nunca sonará en ninguna radio a nivel nacional, otra de esas olvidadas, incómoda a los oídos lineales que nos han sumergido en esta miseria. Bajo el sabor reinante en los paladares cuando nos creímos que los días de vino y rosas durarían eternamente.  Hipnotizados por luces aromatizadas de estímulos visuales que nos escondieron la cruel realidad que ahora nos toca tragarnos.
Un hedor de vinagre y malas hierbas.
Eso resumiría a la perfección esta jodienda diaria que nos han sumergido en una sinrazón incomprensible para el ciudadano de a pie, pero con toda la transparente claridad de opacidad de aquellos que se creen capaces de gobernar a la plebe. Nuestra herencia. La lacra arrastrada desde los tiempos oscuros, donde pensar era sinónimo de quedar sepultado en una zanja o la cruz servía para esconder a cientos de Judas carentes de perdón terrenal y prominentes vientres.
Nuestro error fue pensar que podíamos ser libres.
Sedientos por no sentir el roce de los grilletes contra la piel permitimos que los casposos retazos de aquel genocida, escondiesen la basura bajo las alfombras e impregnar el ambiente llenando sus bocas con la palabra democracia.
Su gran juego de mortales tahúres.
Echar tierra sobre los cadáveres para dejarlos en el olvido con el pretexto de la tolerancia. Permitiendo que aquellos que mamaron la locura de aquel bastardo dictador pudieran volver al poder con distinta careta y diferentes cadenas.
Nos sumergieron en una espiral de necesidades ficticias, deseos comprados y vidas de anhelo de los deseos del prójimo. Una lobotomía a la individualidad bajo la maravilla de las decenas de canales de televisión para evitar el libre pensamiento, comprando para ser felices y poder abrazar con entusiasmo el tan glorioso Neoliberalismo.
Lamentablemente para nosotros toda gran fiesta acarrea una monumental resaca y cuando la burbuja explotó, los días de los lamento dieron su inicio. Atados. Esclavos de nuestros propios deseos y, no nos engañemos, culpables.
Desde este servidor que escribe hasta tú querido lector que me prestas los ojos para leer estas líneas. Nos dejamos marcar como ovejas, disfrutando de la narcótica sensación de no pensar y sirviendo pleitesía a una tecnología que hace tiempo de llenarnos de beneficios. Exceso de información para cubrir la mentiras de la honorabilidad de los políticos, donde la corrupción teñida con un ficticio problema gubernamental sobre un peñón perdido de la mano de dios, no es suficiente. No les queda otra. El comodín de terror ya no es buena pantalla.
A fin de cuentas saben de sobra que si existe otro político muerto con herida de bala, no será por ningún terrorista del norte sino de un jornalero del sur al que le han dejado sin casa o subsidio.     
Usando cualquier foco para desviar la atención como los gritos de independencia con forma de cadena del este, demasiado politizado para mi gusto, pero cuyo trasfondo tiene tanta legitimidad como el deseo de elegir de cada uno que nación palpita en su corazón. Libertad. Esa es la palabra que tanto miedo provoca a todos aquellos personajes de bigote rancio, brazo en alto y deseo de ponerse cara al sol.
En el fondo creo que es una cuestión mal planteada.
No es tanto quien no quiere pertenecer a este país como el hecho de quienes quieren quedarse dentro.
Se me ocurren todos esos jóvenes sobradamente preparados que han tenido que emigrar con media docena de idiomas a sus espaldas, tres master y dos carreras. Me pregunto si se acordarán de España cuando consigan otra nacionalidad y hagan sus vidas lejos de aquí, mas si cabe, después que escuchasen el momentazo de vergüenza ajena de esta semana a manos de la Botella mas famosa.
Esa mezcla de analfabetismo y carencia total de ridículo para salir a defender una caduca candidatura de juegos olímpicos, cuyo agujero económico, solamente fue superado por su amago de Ingles, digo imitación mala de Chiquito de la Calzada.
Recordando que esa misma “ilustrada” fue capaz de irse de Spa cuando cinco familias enterraban a sus hijas o mostrar su estúpida homofobia poniendo como ejemplo unas peras y manzanas. Lindezas que en otra parte del mundo hubieran hecho dimitir hasta el mayor caradura pero que aquí se convierten en mera anécdota.
Spanish are different.
O como diría Anita: “The gente que life in Hispania es diferente naino naino na.
Así pues este es nuestro futuro donde la izquierda roba con la mano derecha y la derecha robando con la izquierda. Gobernados por gente cuyo estudio o comprensión de la realidad humana es deficiente, meando fuera del tiesto y rezando porque de aquí a unos años, las nuevas generaciones posean la inteligencia justa para ser concursantes de realities o nuevas generaciones para fotografiarse cual anormales, con banderas que tanta sangre y dolor causaron.


Se me olvidaba que ayer la selección de millonarios empató ayer….desastre nacional.         


Leia Mais…

9/03/2013

REGRESANDO A MEDIANOCHE

El verano llega al final con mas pena que gloria, al menos en cuanto al tiempo se refiere, puesto que en cuanto al resto ha sido tan movidito como de costumbre. Ya me estoy acostumbrando a ello. La verdad es que vivir sin caos sería tan aburrido que seguramente terminaría volviéndome loco o al menos creando un personaje con la psique tan perturbada como para crear una rebeldía.
Así han trascurrido estos días.
Volviendo a hacer girar la puerta de doble sentido que me ha acompañado desde hace casi diez años. No mirando atrás ni pensar en un futuro que con cada movimiento se aleja de cualquier deseo. Intentando mantener un equilibrio sin red pero sabiendo que me caeré dado que soy un jodido inconformista, tal vez sea la mala leche de serie, al menos eso quiero pensar yo las veces que esbozo una sonrisa.
Una mezcla explosiva que apenas me ha dado tiempo a pensar pero que me ha hecho aprender a negarme a cargar con penas ajenas. Con cargar con mis propias cruces ya tengo suficiente, a fin de cuentas no son pocos mis errores como para ser egoísta y coger los de los  demás.
Así que la puerta giratoria ha dejado a gente fuera, sin malos ratos o palabras duras, un leve adiós y el olvido disfrazado de sombra aunque sea a pocos centímetros. Hay heridas abiertas que parecen que pueden acabar sangrando de nuevo. No es mi deseo. Pero no se puede vivir solo con deseos sino esperar lo que ocurra y asumir las consecuencias.
Sin embargo mi exilio a la hora de las brujas de Nunca Jamás ha tenido cosas buenas, como un chico sin nombre, locuras de gimnasio o hadas con mala leche. Pequeños fragmentos nacidos de una defectuosa imaginación que no entiende de descansos vacacionales.
Todo nacido entre la certeza que mi ojito derecho sigue aportándome la razón, sabiendo cuando realizar preguntas y otorgándome el espacio que siempre necesito para intentar volar o pegarme al suelo. Ella lo sabe. Ese es mi equilibrio que me ha permitido aprender a mirar mas lejos del ombligo y descubrir un mundo nuevo a cientos de kilómetros, un placer con acento catalán, que esconde una de las mejores personas que he conocido en los últimos tiempos. Es curioso cuanto se parece a la otra bruja que conozco. Capaz de encontrarme una sonrisa o un dibujante según las necesidades, detalles que me hacen volver a creer en la magia.
Así pues tras un fin de semana de rock donde reconocer que las Zar
agozanas también entienden de Rock o declarar la rebeldía de un baile ska cuando solo una Madrileña quería que ver a unos punkis ochenteros, he de decir que he vuelto a disfrutar de un festival.
 Tal vez sea porque los payasos en pareja se entienden mejor.
Aunque se queden sin voz, se coman moscas, acaben botando por haber encontrado un palo o gritando haber descubierto el verdadero problema Vasco.
En fin buen verano que terminará con la guida de unas campanas de bodas…si no nos ahogamos.



Leia Mais…

9/01/2013

SOBRE VIVO

Tras un fin de semana duro y lleno de música a todo volumen el domingo no somos sino despojos con amagos de resacas y ojos legañosos. Es lo que sucede cuando mezclas de todo un poco encontrándote con con tu memoria de los noventa, banda sonora de tu propia historia, dejando atrás los malos rollos o los pasados que cruzan por delante como fantasmas en pena.
El pasado pasado es y así debe continuar.

Por eso ha sido un fin de semana divertido, repleto de anécdotas y mezclas extrañas desde Bielorrusia, hasta Zaragoza, pasando por Madrid y con escala en Valencia. Mezcla. Sin otra función que divertirnos, disfrutar y seguir sintiendo que el tiempo se detiene para disfrute del personal.
Así pues un buen año para sobrevivir al envivo.





Leia Mais…

SOLAMENTE UNA PIEZA...