Parece que por fin llego el verano, ya llego la fruta y el que no se agache es un hijop... Bueno que tras meses y meses de mal tiempo, lluvias, granizos y heladas por fin el sol y el calor asoma cuando te levantas. La verdad es que el calor no es precisamente algo que me agrade, eso de sudar y acabar con dolor de cabeza día si y día también no es un hobby muy saludable que se diga. Aunque después de tantos meses de tiempo apocalíptico no viene mal un poco de sudor y pantaloncitos cortos, es mas, ahora que apenas llevamos unos días hasta lo agradezco...ya hablaremos dentro de unas semanas. Es tiempo de playita, de cervezas en terrazas y piscinas saturadas de cloro. Es tiempo de quemaduras solares (Cruzo los dedos para librarme este año) de parrilladas y sobre todo noches de verano. Realmente adoro las noches de verano, porque son noche de fiesta, noches cálidas que exprimes hasta que se hace de día, esas noches de txozna y concierto que nada importa y siempre te rejuvenece los años que el invierno te suma. Así que el verano ha llegado y es hora que todos empecemos a tomar el sol.
Cada vez que veo ese anuncio me doy cuenta que esta equivocado, no, nosotros no necesitamos cuidarnos porque gracias a vete a saber qué nuestra generación fue la última que se se salvó del rodillo de la estupidez. Sí, conozco a parchis, conozco lo que son las campas, los phosquitos y toda la bollería industrial saturada y una vida sin móviles. Lo digo en serio, hubo un tiempo que no existían los móviles y había que usar una cosa, como se llamaba...¿Timbre? para saber si estaba o no en casa tus amigos. Ahora todo se resume a palabras cortadas y llamadas para contar lo mucho que te has emborrachado el fin de semana. Que decir tiene que yo me he mamado tantas veces que no recuerdo el número, pero aún así siempre intenté buscar un límite. Realmente no me gustaba que mis padres vieran que había estado perdiendo el tiempo y por ello intenté controlar el límite de no retorno. Aunque no siempre lo controle, pero bueno eres joven y a veces son cosas que pasan. No cuidábamos lo que comíamos o bebíamos y realmente eramos felices, no maquinas de perfección muscular y nulidad neuronal que tan solo sirve para intentar buscar bronca noche sí y noche también, entre raya y copa. Es cierto que yo también he visto drogas, broncas y lo peor, he estado metido en alguna de ellas pero eran eso, una bronca. A veces recibías, a veces dabas pero siempre perdías, porque te sentías mal cuando lo hacías y mal cuando recibías. Sin embargo ahora se saca pecho de sacudir veinte contra uno, las broncas acaban convirtiéndose en batallas campales y duran incluso meses. Ya no existen los puñetazos, sino navajas y bates de béisbol que roban vidas como si fueran caramelos...pero son menores y realmente no saben lo que hacen. El problema es que saben de sobra lo que hacen, están demasiado informados, demasiados crecidos, viven demasiado rápido y sin embargo están des educados. Solo existen sus coches, sus trapicheos y su día a día. Estoy de acuerdo que a los menores hay que protegerlos pero ya antes existían violadores, asesinos y todo tipo de hijos de puta. Si bien hay que darle todos los derechos del mundo pero sin duda hay que enseñarles que tienen obligaciones que parecen olvidar...sera cosa neuronal.
P.D. Creo que me he puesto algo abuelo cebolleta, no sé, será cosa de la edad jajaja.
Prometo que será la última vez que hable de mi ombligo, han sido demasiadas líneas, tantas que ya incluso yo me he aburrido. Creo que al fin vuelvo a encontrarme dentro de mi mapa y lo mas importante, no tengo miedo a continuar en el camino. Tengo una deuda pendiente con la felicidad y creo que la voy a saldar con creces, sin remordimientos y sin pensar en disfrutar, sino simplemente en disfrutar. Tengo en mi Este a alguien que me ha enseñado a sentir, de color rojo como el sol y tan cálida que ha conseguido derretir la barrera que me auto impuse por estupidez y miedo. En mi Izquierda tengo a mi bufón preferido, el único que no me juzga aunque haga las mayores estupideces del mundo. Silencio compañero de luto y conversador incansable en la resurrección de un corazón roto y una cabeza demasiado loca como para pensar mas allá del respirar. El norte necesita ser mi cabeza y para ello tengo a mi estudiante preferida de psicología, tan metódica que a veces me sorprende y sin embargo me pregunta por mi corazón y mi cabeza cada una de las veces que me he internado por las mala sombra. En cuanto al sur siempre estará la sangre, es decir mi viejos y todas aquellas figuras que han formado parte de mi educación, de mi amor y todo el pasado en el que mi familia cuidó de mí. El norte me dirá a donde ir cuando tenga dudas. El este me acogerá con el cálido beso de su sonrisa y me ha hecho recuperar cada uno de los latidos que creí olvidados en mi corazón. El oeste me intentará tirar hacia la izquierda, siempre hacia la izquierda, entre sonrisas y ganas de saber que la amistad se puede resumir en algo tan simple como esa mirada, de cara de tez oscura, perilla revolucionaria y ojos siempre vivos. El sur siempre quedará el recuerdo, saber de donde vienes y a donde vas, sin olvidar que cada uno de los pasos a seguir, siempre tienen un sentido porque darlos. Por eso nunca perdonaré y menos olvidar si alguien hace daño a alguno de mis puntos, si alguno de mis puntos sufre yo sufriré y como he dicho, estoy bastante harto de sufrir. Me da igual que sea psiquicamente, física o emocionalmente, simplemente jamás perdonare y menos olvidaré. No es una amenaza es una declaración de intenciones y como tal es mejor avisar que lamentar, porque ellos me hacen andar y sin ellos volvería a caer. A su lado se juntarán mas personas, mas cercanas y lejanas y se acercarán al punto que mas les guste parecerse. Algunas quedarán atrás a otras las dejaré yo porque como en todo, nada dura para siempre pero sin duda mis cuatro puntos los quiero cerca de mí por mucho tiempo. Tanto como para andar y caer para volver a levantar, para seguir adelante y poder viajar a visitar a una amiga a miles de kilómetros en avión o internarme en mi cabeza para escribir de nuevo algo que solo mi cabeza se imagina.
Esto es lo que quiero y esto es lo que tendré......todo lo demás sobra sino se resume en felicidad.
A veces te sorprende la adaptación de las personas y como sin quererlo ganan un sitio especial dentro de tí, es especial porque te prometiste cerrarlo a cal y canto y sin embargo cabezones de ellos, lo okupan sin que puedas impedirlo. Realmente no quieres impedirlo pero tu pasado te obliga a cerrar esa puerta, ponerle mil cerrojos y prometerle que no abriras la puerta bajo ningún concepto. Nada de eso sirve. No puedes evitar que alguien comienza a conocerte tan bien que te asuste, tanto que tu miedo te posee y te obliga a volver a tapiarlo. Nada de eso sirve. Porque ya te conocen, ya han discutido contigo, ya te ha hecho perder la cabeza con un beso y el miedo con una sonrisa. Sabe que las cadenas de bici te encantan en tu muñeca o que la fecha de tu cumpleaños puede valer para hacerte un regalo que a ciegas, acierta sin dudarlo. Porque tu miedo ha desaparecido, porque eres feliz y realmente comienza a dar las gracias por despedidas pasadas.
Nunca pensé que escribiría estas líneas, menos a estas horas y un domingo con la tormenta del siglo tras las ventanas. Mas que palabras es una sensación, algo que no sé si habéis sentido alguna vez, un extraño deseo de necesitar escribir. Son momentos de pensar, de entender y comprender que tal vez todo esta dispuesto para que te encaje, como si la vida fuera un puzzle, algo que necesitas montar con cada respiración. Tal vez debes encontrar el camino, esa forma de ver tu vida, de sentirla como tuya y tomar decisiones que te lleven a desear disfrutarla como si fuera el último día. Tal vez que te dejen y no sientas nada fuera un aviso. Sin ese "hasta nunca" no hubieses empezado a teclear un "kaixo" para comenzar a sentir realmente que has encontrado a alguien especial, que sabe subirte al mas alto de los cielos con un beso y bajarte a la tierra cuando estas en las nubes. Tal vez sin esa perdida no hubieses conocido o reconocido a esos pocos amigos que todo el mundo deberíamos tener, esos que no le importan lo que opine la humanidad de ti, para ellos eres especial y tu lo eres para ellos. Tal vez por eso te crean dudas, por eso andas entre la eterna encrucijada de querer y desear ser feliz. Tal vez por eso te dedicas a escribir sabiendo que no lo haces bien, tal vez por eso empecé este blog, estas entradas a veces con todas las ganas del universo y a veces sin ganas de aporrear letra alguna. Tal vez es un diario de tu vida, algo tuyo, algo que sabes que puedes leer cuando algo no este bien, cuando dudes de algo que sientes o cuando quieres recordar lo que no quieres volver a sentir. Tal vez esto te hace mas valiente, dejar tus dudas atrás y decidir que te gusta lo que estas viviendo. Da igual que sea con tus amigos, con tu familia o con tu gente y sobre todo con la que te hace sentir, que una vez mas acabarás enamorado aunque no creas en el amor. Solo por eso vale la pena escribir estas líneas y sentir que otro día mas no has sobrevivido, sino que lo has vivido y solo unas palabras en una pantalla te han vuelto a hacer esbozar esa sonrisa chorra que hace tanto tiempo creíste olvidada en el armario.
Entre pitos y flautas han pasado los 28 y mi vida ha cambiado, mi forma de ver las cosas, mi forma de valorar cosas que antes las daba por supuestas. No dar nada por supuesto y sobre todo valorar la gente que realmente te valora, no a medias tintas, ni palabras bonitas. Son los hechos, el día a día y que la vida es para ser feliz todos los días y evitar que se te vuelva monótona. Con 28 años ha vuelto la tinta a mí, un tatuaje nuevo en mi pierna que hace que empezar un nuevo principio en una vida algo viejilla que ya empezó hace 28 añitos. Esta semana la he compartido con los amigos, esos que cuentas con una mano, todos han tenido un ratito y la verdad es que productivo, ha sido productivo. Risas, buenas palabras, arreglar las cosas que estaban algo dañadas y aclarar todo lo que faltaba por aclarar. Bueno también han pasado otras cosas pero eso que lo cuente los interesados... Esta semana la pasaré con la persona que me esta haciendo volver a sonreír, esa que a aprendido a darme caña y cariño por partes iguales y que ahora me hace sentirme agusto decir que quieres a alguien de forma especial. Así que así son mis 28 deseando que sigan como estoy ahora, con trabajo, amigos, salud y sobre todo con una pelirroja en mi vida. Ahora un poquito de música, la última canción que he oído antes de llegar a casa y me a recordado porque odio Mazarredo.
No se si será la edad, la crisis de los 28 (Si es que existe esa crisis) o cualquier otra chorrada que se me ocurra de aquí al acabar estas líneas pero me siento enfermo. Enfermo con unos mocos galopantes, un dolor de cuerpo de la ostia y sin ganas de levantarme ni para coger un maldito pañuelo de papel. Enfermo dentro de mí, demasiado raro como para seguir pintándome la sonrisa, demasiado cansado de tener que sobrevivir día tras día a la misma rutina. Estoy enfadado de andar y no llegar a ninguna parte, de no querer ver lo que mis ojos no quieren enseñarme y sobre todo, hasta las pelotas de parecer estar enfadado con la felicidad. Mi inspiración parece una enfermedad terminal, mi imaginación ya huele a podrida y realmente no me siento con fuerzas para resucitarlos, para que vuelva a entrar en mi desordenada cabeza. Es verdad que siento vacío y que hay gente que me ayuda a sonreír, a querer levantarme cada mañana de la cama pero realmente me estoy quedando sin gasolina y tengo miedo a quedarme tirado en el camino. Miro a mi alrededor y la gente evoluciona, cambia, se vuelve mas autónoma y realizan sus sueños y viven sus vidas, es verdad que algunas están llenas de mentiras, pero incluso así son sus vidas. En cambio mis días se pasan mirando al reflejo de los espejos, ese mismo que siempre es el mismo y sin embargo día tras día lo reconozco menos. Bueno mejor dejar de escribir, es lunes, ando medio enfermo y a punto de cumplir años...espero que solo sea eso, por mi salud mental, imaginación y por todos los que me rodean y se preocupan por mí. Tal vez sea porque un grande de las letras ha dejado para siempre de escribir y deleitarnos o tal vez será porque siempre seré yo, con mis cosas buenas y mis mil y una maldades. Tal vez porque seré una eterna paradoja en un mundo que a veces es triste a veces alegre pero casi nunca justo.
La verdad es que a veces soy demasiado racional, negativo y emperrado en buscar sombras donde solo hay luces. Tengo una luz que siempre a estado ahí y me quiere, alguien que no duda de mí y después de las mil y unas vueltas de tuerca de mi cabeza sigue a mi lado. Tengo una amiga de esas que valen una vida o dos o miles de días como los de hoy que es su cumpleaños. Tengo un amigo que ha sido y será mi pilar, nunca podré darle todo lo que me dio cuando me jodieron, aplastaron y destrozaron cada parte de mis entrañas como si fuera un juguete de usar y tirar. Pienso en ellos y no entiendo porque tengo que ser tan negativo, porque tengo que tener miedo si sé que con ellos nada me puede pasar. Estas líneas son para vosotr@s: Mi pelirroja que sabe darme y aguantar, que sabe amar y darme toñejas cuando las merezco y sobre todo que me ha vuelto a dar sentido a las palabras "Te quiero" Para mi fruta que sabe escuchar y aconsejarme sin tapujos y con la verdad siempre, no hace falta maquillajes y por eso este día en que cumple (CENSURADO) años decirle ZORIONAK Para mi incondicional rojo, de esos de sueños imposibles e intenso latir, ese que tanto tiempo a estado a mi lado a pesar de sus heridas, a pesar que su corazón tambien andara partido hacía de tripas corazón y pensaba antes en mí que en él mismo. Por eso hoy tenéis estas líneas, llenas de agradecimiento y rezando a un dios que no creo que jamás os vayáis lejos, que jamás sienta que estéis lejos. Estas líneas son para vosotr@s AINARA, NAI, TXINO vosotr@s sois mis tres en uno particular.
Es lo que siento ahora mismo, impotencia ante lo que he visto. NO se puede defender sin ni siquiera intentar atacar. No se puede hincar la rodilla en el minuto 1 de la segunda parte NO se puede dejar de luchar, ni siquiera hacer una falta o intentar presionar. NO se puede morir sin pelear, no de esa forma, no con esa camiseta. Creo que me equivoqué al pensar que sabían lo que significaba tener esos colores, ese escudo. Pensé que dejarían de ser millonarios por dos horas y comprenderían que detrás de ellos había millones de personas. Seguramente estemos ante el mayor equipo del mundo, puede que nos tocara bailar con la mas fea...pero nunca puede ser la excusa a usar. No se puede morir sin pelear, sin chutar o siguiendo defendiendo con miedo a que te caigan mas goles. Da igual perder por 3 que por 4 o 5 da igual, si lo haces peleando y creo que no han sabido pelear, la gente no se merecía esto. Creo que el niño que hay dentro de mí no volverá a salir por lo menos hasta que me vuelvan a ilusionar y eso tristemente, lo veo muy difícil. Aun así y para siempre
Hoy es un día especial, diferente. Un momento en el que olvidas que el futbol actual son 22 millonarios dando patadas a una pelota. Hoy es el día que tal vez sea diferente, al ver a todos esos niños vestidos de dos colores, los dos mismos colores que han acompañado a sus padres y a sus abuelos antes que los vistieran ellos. Por eso hoy toca hablar con el corazón, volver a ver con los ojos de ese niño de tres años que vio bajar la Gabarra por la ría. Ese mismo chaval que se ha emocionado al ver que al igual que tú, los niños de ahora aun mantienen algunas ilusiones igual que las que tuvistes tú. Hoy es cuando descubres que vives en un sitio donde todo es especial, demasiados días sin poder disfrutar, demasiados desvaneos con la segunda división o sin una dulce al que agarrarse. Son demasiados juramentos, demasiadas noches de mala ostia y demasiadas repeticiones de glorias pasadas podían ser demasiado para cualquier otra aficción....cualquiera menos para esta. Semana tras semana han estado ahí, da igual que lloviese o hiciese sol, da igual que la semana anterior se perdiera por cinco goles o se ganara con un partido sin la mas mínima gloria. Harían lo que harían siempre se han confiado en ellos, así que ahora es tiempo de disfrutar de los buenos momentos. Si tuviera que decir algo a los jugadores, si pudiera hablar con ellos solamente un minuto no lo haría para intentar motivarlos. Sé de sobra que después de lo que vieron y estarán viendo en Valencia no necesitan palabras de ánimo. Ellos saben que ya son héroes y lo mas importante, saben que están a 90 minutos de convertirse en leyendas, si he dicho leyendas porque si algo se caracteriza este equipo es que jamás se olvida de su pasado. Es una forma de vida, una filosofía que no ha cambiado en mas de cien años y por supuesto deseo que no cambie en otros cien años. Ellos lo darán todo y mas, lo saben porque son los elegidos, son los que tendrán en vilo a millones de personas y por ello deben saber que eso es un orgullo y una obligación mas que suficiente para vaciarse en este partido a cara o cruz. Aunque como todo fallarán ocasiones, no llegarán a pases o incluso se pueden poner cuesta arriba, a fin de cuentas juegan contra el mejor equipo del mundo hoy en día. Con los pasos de los minutos les fallarán las fuerzas y entonces es cuando deben cerrar los ojos y durante una milésima de segundo su cabeza dibuje imágenes de lo que realmente esta pasando unos cientos de kilómetros al norte. Que dibujen cada pueblo, cada barrio, cada calle, cada casa o cada bar en la que millones de camisetas teñidas de rojo y blanco y solo una sensación. Que sientan que sus carreras son la de los miles de niños, que sus pasen los dan todos los aitas y amas que han disfrutado, disfrutan y disfrutarán con este equipo. Todos somos el Athletic y ellos once lo saben, lo sienten y que cojones, son los que van a levantar la copa. Porqué jugamos contra el mejor equipo del mundo pero ellos deberán pelear contra la mejor afición. Por eso y por mas AUPA ATHLETIC!!
P.D. Como hay que hacer una promesa que mejor que ir mañana a la amatxu de Begoña y decirle esa frase que por una vez no sonará mal:
A veces te preguntas para que escribes, para que gastas el tiempo y el esfuerzo en unas lineas que no saldrán nunca de anonimato, que no serán las que te saquen de pobre o que no harán que recibas ningún premio. Realmente lo piensas, pero en seguida, la lucecita de tu cabeza te hace recordar que es por tu corazón porque lo haces, es algo tan personal que ya no concibes hacer de otra forma las cosas, no sabes otra forma de ser ni existir. No comprendes tu vida sin las palabras, esas mismas palabras que significan tanto para unos y tan poco para otros. Esas palabras que te dan sonrisas y lágrimas, hasta el punto que una misma frase te puede hacer sentir de mil y una formas diferentes. Entonces comprendes que lo haces por la gente que te lee. No por la gente que te da palmaditas en la espalda después de leer dos lineas, no, sino a aquellas que te siguen que les gustan tus palabras y que esperan que escribas algo nuevo. Es esa sensación la que te hace esforzarte, sacrificar horas de sueño y tiempo de ocio par recibir el mejor de los regalos...hacer sentir. Hacer sentir que llegas a esos observadores mudos y que aunque sea del tamaño de una mota de polvo, hacer que todo sea un poquito menos gris.
Después de haber tenido que ponerme serio con mi ordenador y hacer realidad mis amenazas de resetearlo, vuelvo a tenerlo en orden. No se cuanto me durará de nuevo este ordenador limpio e inmaculado pero de momento parece que me hace caso. La verdad es que tengo la sensación que los ordenadores tienen vida propia, igual que las impresoras o cualquier otro aparato eléctrico del que dependemos día y noche. Llegará el día que nos borrara los archivos importantes, las fotos de nuestra vida e incluso nuestra música. Toda la vida puede darse al traste en estos días si nos falla nuestro teléfono, ordenador o cualquier otro aparato del que estamos enganchados a diario. Es una droga de dependéis continua, de la que nunca estamos saciados, siempre vamos un paso atrás y siempre sale algo mejor. Tal vez debamos irnos al monte y tirar nuestros teléfonos porque nos lo creamos o no, hubo un tiempo en que sobrevivimos sin ellos y la verdad nunca fue nada mal, mas que nada porque no cuesta nada hablar a la gente en vez de teclear o llamar a un timbre en vez de hacer una llamada.
Hay que darse cuenta que siempre es mejor la realidad que las cosas virtuales.
A veces cuando pasa el tiempo ves las cosas desde otro punto de vista, uno mas objetivo e íntimo en el que te sumes en tus miedos, los miras a la cara y valoras todo lo que te ha pasado en los últimos tiempos. Como canta Fito, hay que parar en el camino y observar, valorar y sobretodo ser sincero con uno mismo, eso ante todo. Es mirar al vacío que a veces crean en tu interior los reveses de la vida, ya sea emocional, laboral o cualquier otro ambito. En mi caso fue un reves que me dejó vacio, sin poder sentir y lo mas importante sin querer sentir. Un vacío que intenté llenar de forma rápida, para calmar todo esos malos momentos en los que creí ser yo y sin embargo ni me encontraba. El sentir algo diferente, algo vivo que evoluciona con todas esas joyas en forma de personas, que he ido conociendo han llenado tanto ese vacio que ha rebosado. Tres años, es demasiado tiempo para olvidarlo rapido y el egoismo de haberte perdido parte de tu vida te hace actuar sin pensar, de forma poco cabal y sobre todo haciendo daño innecesario. Ese daño que solo el recuerdo te hace sacar de lo mas jodidamente malo de tu lado mas oscuro, un lado oscuro que sellare con tinta y sangre dentro de unos días... De momento pensaré en cerrar heridas que he abierto por culpa de no saber rellenar mi vacio con moderación.
MUXUS para tod@s a los que han peleado por mí y me han ofrecido su entendimiento a mis vueltas emocionales. Para lo que me causo este vacio solo decir que "La locura asesino al perdón...
La verdad que puentes como estos, esos días seguidos que te sirven para desconectar no tienen precio. Es verdad que no haces nada realmente especial, no saltarás en paracaidas, no desciendes ningún barranco, ni te tiras de un puente con una cuerda. No haces nada que recuerdes como único, como tu primera vez en algo y sin embargo son momentos que no cambiarías por nada del mundo. Son días en los que la compañía vale mas que las emociones únicas, días en los que para lo que único usas la cabeza es para resolver enigmas de un profesor de dibujos animados. Días de peliculas a medias, quemaduras solares y borracheras con un poquito de lambrusco. Son días que tal vez no recuerdes con exactitud dentro de unos añitos y sin embargo, son esos días los que te recargan para que los días grises no te acaben convertiendo en un ser en blanco y negro.
